“La fuerza de la gravedad considerada como una figura femenina, porta en su mano derecha a nuestro satélite natural, la Luna, mientras yace sobre el hemisferio norte del globo terráqueo, simbolizando la fuerza de Atracción Universal, ese gran magnetismo correlacionado con el Amor como elemento primigenio del Universo.

Vale decir que se hace una equivalencia entre la fuerza física de la atracción gravitacional y la fuerza espiritual del Amor, que, literalmente, configura la totalidad del multiuniverso físico.

El pedestal de la obra está incorporado a la misma, formando parte importante de ella, y simbolizando, el giro de rotación y por ende el tiempo. El movimiento de traslación se aprecia en una visión general del sistema Tierra-Luna”.